El poder transformador de la IA y la Automatización

La inteligencia artificial (IA) se presenta como un recurso invaluable para las empresas al permitirles focalizarse en actividades que generan valor o impulsan los ingresos, contribuyendo así a elevar la satisfacción del cliente y facilitar el crecimiento empresarial. Al analizar la demografía del cliente, su comportamiento de compra y los límites de gastos, la IA se convierte en una aliada estratégica al proporcionar a las empresas información clave para personalizar y mejorar sus procesos.

En contraste con el pasado, donde las iniciativas podían prolongarse entre tres y seis meses, la implementación de soluciones impulsadas por IA en la actualidad posibilita que las empresas las integren en cuestión de días o semanas. Este cambio temporal brinda a las empresas una mayor flexibilidad para adaptarse, concentrarse en sus clientes y realizar ajustes a una velocidad notable.

En el ámbito de las iniciativas de inteligencia artificial, las plataformas de bajo código surgen como una herramienta esencial que facilita a las empresas analizar datos y flujos de procesos sin la necesidad de contar con programadores expertos. El bajo código democratiza el acceso a la capacidad de la IA, permitiendo a individuos adaptarse rápidamente, comprender conceptos y aplicarlos de manera inmediata. En cuanto a la línea temporal de acción, lo que antes tomaba meses para obtener información ahora se reduce significativamente a cuestión de días, horas o incluso minutos. Este avance tecnológico acelera el ritmo de toma de decisiones y mejora la agilidad operativa de las empresas.

Automatización Inteligente en Acción

Un ejemplo ilustrativo de esta transformación se evidencia en la empresa de viajes australiana Flight Centre Travel Group. Utilizaron una tecnología interna llamada HUB, diseñada para clientes corporativos, que almacenaba de manera segura el perfil del viajero, incluyendo información sobre viajes frecuentes, preferencias de asiento, elecciones gastronómicas y documentos de identificación. Anteriormente, la construcción manual de este proceso demandaba hasta 16 semanas.

Para optimizar este procedimiento, la compañía implementó Nintex K2 Cloud, una solución que permitió recopilar la información del cliente y configurarla mediante RPA (automatización de procesos robóticos). Este enfoque automatizado utilizó los datos recopilados para construir automáticamente los sitios relacionados. La implementación abarcó 1,200 sitios, una tarea que normalmente requeriría 3,600 horas de trabajo. Con esta modernización, la empresa logró estimar ahorros significativos, alcanzando aproximadamente $175,000 en el primer año de implementación. Este caso ejemplifica de manera concreta cómo la inteligencia y la automatización pueden transformar procesos manuales laboriosos en soluciones eficientes y rentables.

Enfocándose en lo esencial

La integración de la inteligencia artificial y la automatización de procesos representa una revolución para las empresas, permitiéndoles concentrarse en actividades estratégicas, personalizar procesos y mejorar la eficiencia operativa. La rápida implementación de soluciones basadas en IA proporciona a las empresas una flexibilidad sin precedentes. La democratización de la capacidad de la IA a través de plataformas de bajo código amplía el acceso a esta tecnología, capacitando a individuos para adaptarse ágilmente y aplicar conceptos de manera inmediata.



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